El Hijo De Santa Brígida
Santa Brígida tenía un hijo muy alocado, que le hacía sufrir mucho
Ella rezaba a la virgen cada día para que el alma de este hijo rebelde no se fuera a condenar
De pronto al muchacho se le ocurrió irse al ejército, y en la guerra lo mataron
Y murió sin confesión ni comunión
La santa lloraba cada día y le preguntaba a la virgen por qué habiéndole rezado tantas veces por este pecador lo había dejado morir así
Y una noche tuvo Brígida un sueño, vio que ante el trono de DIOS llegaban los demonios a protestar:
"venimos a quejarnos, porque nosotros tenemos permiso de acercarnos a los moribundos a llevarlos tentaciones de desesperación, pero hace unos días se murió el hijo de Brígida y cuando él estaba herido agonizando, llegó María la Madre De Jesús y nos alejó a todos y no permitió que ningún demonio se le acercara a dicho joven"
Jesucristo se volvió hacia la virgen María y Ella, sonriendo, le explicó: "Hijo la madre de ese joven me había rogado tanto por él, que consideré como un gran deber ir a acompañarlo en la hora de su muerte, y como no había sacerdote cercano, le inspiré que hiciera un acto de contrición y obtuve que muriera rezando con mucho fervor
Pues Era Mucho Lo Que Brígida Me Había Pedido Por La Salvación De Esa Alma"
Entonces el Divino Juez con palabras de gran solemnidad dijo a los demonios "LO QUE MI MADRE HACE ESTÁ BIEN HECHO, ALÉJENSE USTEDES DE AQUI"
Después de este sueño tan consolador ya no volvió a angustiarse más Santa Brígida por la salvación de su hijo, pero si rezaba mucho cada día por su eterno descanso, pues en la Santa Biblia dice DIOS:
"yo perdono los pecados pero no los dejo sin castigo" (Éxodo 34,7) y las almas de quienes no fueron muy buenos en la tierra tienen que penar mucho en el purgatorio ,Por eso tenemos que ofrecer misas, oraciones, sacrificios, y limosnas a los pobres, en sufragio de las almas de los difuntos
San Agustín decía: "Una flor sobre su tumba se marchita, una lágrima sobre
su recuerdo se evapora
Una oración por su alma, la recibe Dios"
