Leyenda De La portera Fugada
La literatura antigua contaba la leyenda de la monjita portera del convento que desanimada un día en su vocación dispuso huir del convento
Salió de Mañanita sin que nadie la viera, y todo el día las personas que pasaban por el frente de la pieza de la portería veían a la hermana portera muy piadosa con los ojos en alto y no se atrevían a charlarle por no distraerla en su oración
Al anochecer la pobre hermana prófuga sintió remordimiento de haberse fugado y se volvió al convento
Pero estaba segura de que al llegar seria expulsada o al menos recibiría un enorme castigo por su fuga
Y sucedió que nadie había notado su ausencia
Porque la estatua de la Virgen que estaba en la portería había tomado su rostro tan parecido al de la monjita, que todos los que pasaron creyeron que era la verdadera portera que estaba rezando
Más tarde cuando supo toda la verdad, la monjita exclamaba: "Quizás sea el fruto de una salve que yo le rezo todos los días para pedirle que me conceda la perseverancia en la vocación, y la fidelidad en el bien hasta la muerte"
!La Virgen sabe hasta "disfrazarse" con tal de poder ayudar!
Tomado Libro Ejemplos Marianos
!La Virgen sabe hasta "disfrazarse" con tal de poder ayudar!
Tomado Libro Ejemplos Marianos